El trabajo con electricidad conlleva unos riesgos que debemos minimizar hasta garantizar que no corremos ningún tipo de peligro. Todos los trabajos de mantenimiento deben realizarse por personal cualificado y con la experiencia necesaria para conocer los posibles riesgos que puede tener la instalación sin caer en la confianza que podría acabar en rebajar las precauciones que se deben tomar para evitar accidentes.
Tenemos varios factores que aumentan el riesgo, por consiguiente debemos ampliar las precauciones, por un lado tenemos todos los factores que forman la ley de ohm, como se ve en el artículo de la ley de ohm, tenemos que a mayor intensidad mayor peligro de lesiones graves o muerte, contando que a mayor tensión mayor intensidad y a menor resistencia del cuerpo mayor intensidad. La zona que recorre el cuerpo una descarga eléctrica también influye en los daños que se pueden sufrir. La duración del contacto con un componente eléctrico, al aumentar el tiempo de la descarga eléctrica aumenta el peligro de sufrir daños más graves. La frecuencia de la tensión eléctrica es otro factor que nos puede variar las consecuencias en caso de electrocución.
La resistencia del cuerpo humano varía dependiendo de varios factores como puede ser la humedad del ambiente,el calzado, vestuario, los guantes de protección, las herramientas que se utilicen especiales para proteger contra contactos eléctricos.
El paso de la corriente por el cuerpo humano puede provocar desde un ligero cosquilleo hasta la muerte, pudiendo sufrir contracciones musculares, paros respiratorios, asfixia, fibrilación ventricular, etc.
Por estos motivos hay que tomar precauciones cuando trabajamos con electricidad, hay que tenerle respeto a la electricidad estando pendiente de los peligros que podemos tener en la zona de trabajo ya que dependiendo de la tensión con la que estemos trabajando, es peligrosa sin necesidad del contacto directo, ya que a partir de ciertas tensiones se puede producir un arco eléctrico y electrocutarnos.
Para evitar daños, trabajando con la máxima seguridad posible debemos coger unos hábitos y costumbres a la hora de manipular elementos eléctricos.
Se tiene que desconectar la fuente de alimentación de la zona de donde vamos a trabajar.
Se de bloquear esa desconexión siempre que el equipo que hemos seccionado lo permita, sobretodo en el caso que estemos trabajando en una zona diferente a la zona donde se encuentra el elemento seccionado.
Se tiene que comprobar que no hay tensión en la zona y los componentes donde vamos a trabajar.
Para evitar daños por posibles reconexiones involuntarias o por otro personal que desconozca que se está trabajando es importante señalizar los elementos seccionados con carteles de personal de mantenimiento trabajando, no tocar o no conectar.
Aunque se haga el paso de señalar también tendríamos que poner a tierra y cortocircuitar las fases impidiendo que en caso de activar accidentalmente la alimentación podamos sufrir daños al saltar protecciones por cortocircuito o fuga a tierra.
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